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NOVIEMBRE 14

Por Leandro Zelaya que vino de M~nagua se sa– be que quieren suprim\r "El C0rrt?afe Y, que han llamado o piensan llamar a Horac10 q~~man con el pretexto de que rinda cuentas de su zn1s10n en Wash– ington, y que hay en el Palacio una gran prevención conha mí.

NOVIEMBRE 15

Don Anselmo anda en apuros. Ya le llamó el Jefe Político para exigirle que presente la finna de Fráncisco Delgadillo, el corresponsal que envió una información de León, firma que Don Anselmo ha per– dido. Delgadillo niega haber enviado a "El Diario Nicaragüense" correspondencia ninguna, y yo creo que dice verdad: él es un pobre zapatero: sieznpre creia que el tal Delgadillo es algún truhán que se ha estado riendo del candor de Don Anselmo enviándole correspondencias comproznetedoras.

NOVIEMBRE 16

Por la noche, cozno a las lO, hallándome en la botica del Dr. Alvarez, llega alli Don Anselmo y nos cuenta que el Jefe Político Isidoro López tiene orden de prenderle y tenerle detenido hasta que no entre– gue la firma del corresponsal Francisco Delgadillo, que mañana, muy temprano, seguramente esfará en la cárcel. Se ve que a Don Anselmo le aflije e in– digna esta amenaza.

NOVIEMBRE 17

A las 7 C~.In. reducen a prisión a Don ,Anselmo. Causa esio aqui penosisitna itnpresión y en algunos indignación muy justificada por "tratarse de un ancia– no' digno por Inil títulos de ser mejor fratado. Escri– be Don Anselmo un articulo que saldrá =añana COInO editorial de "El Diario Nicarsgüense" y que presume será la muerte de éste, después de znudarle varios títulos, quedó con éste: "Cosas del dia"

Visilo en la cárcel a Don Anselmo: estaba con– versando con el Jefe Politico López, Casimiro Vivas y Don Francisco Bolaños. No parece muy abatido y siempre muesfra su altivez acostumbrada.

NOVIEMBRE 18

Ningún cambio en la situación de Don Anselmo. Por la noche voy a verle: esfaban con él Don Gabriel Lacayo y Fernandilo Lacayo. Tengo miedo de que me suceda algo, es decir, que me caiga algún palo

Hasta aquí termina El Diario Intimo de 1896. En

I'sta fecha su autor fue llevado a Managua, de orden su– perior, de conformidad con el siguiente Acuerdo del Poder Ejecutivo: El Presidente del Estado, ACUERDA: Nom· brar al séñol' Coronel Don Enl'ique Guzmán Profesor de Letras de la Escuela de Cabos y Sargentos con el sueldo de su grado. Comuníquese: Managua, 25 de Noviembre de 1896 -Zelaya- El Ministro de la Guerra: Calderón". Al llegar a la capital Don Eilrique fue llevado a presencia del Presidente Zelaya· coíl quien sostuvo el si– guiente diálogo:

GUZMAN.--,Bilenos días seño... Presidente, cómo cs· tá Ud.?

ZELAYA.-Muy bien Don Emique, y Ud. qué tal? GUZl\IAN.-No bien del todo. Fui notificado de presentarme Itoy a la Comandancia General, y estoy a su disposición ...

ZELAYA.-Por el Acuerdo respectivo se habrá Ud. hecho cargo de que ha sido nombrado Profesor de Letras de la Escuela de Cabos y 8al'l:entos. 'l'enemo$ en el Cuartel La lIIomotombo unos negritos a los que queremos

del Gobierno pues la guerra éS eon:lra "El Diario Ni

caraQÜense" y ahora, con la prisión de Don Anselmo' toda la responsabilidad del periódico Tecse sobre mí:

NOVIEMBRE 19

Nin~~n cambio en la situación de Don Anselmo. Corre vahdo el rUlUor de que, para acabar con "El

Diario Nicaragüense" me llevarán a mi a Managua o n:e fregarán de cualquier maners. Por la noche ~i­

slio a Don Anselmo que estaba en el segundo piso del local que ocupa la Policía.

(NOTA: Esta casa es hoy propiedad de Doña Julia Areliano

viuda de Sandino Bone, fl'ente al parque Colón).

NOVIEMBRE 20

Sigue preso Don Anselmo. Por la noche le hago una visita. Tengo miedo de haber tornado de "El eo– znercio" para insertarlos en "El Diario" dos noticias a las que pUl'ie por fítulo: "Noticias graves". Hasta qué punio es triste nuestra situación, hasta temer la repl."oducción de lo que publican los oiros periódicos. No hay en estos momentos ni asomos de libertad de ixnprenta en Nicaragua.

NOVIEMBRE 22

Como sé que al director de "El Comercio" José Maria Castrillo lo tuvieron en la cárcel cinco horas por l~ noticia que dio d~ que ~abian sido confiscado los b1enes de cuafro n1caraguenses, aurnentan mis femores.

Anoche murió Alfredito, hijo de Nie;hilo Chamo– rro y de su eaposa Carznela Benard. Por la :larde voy al entierro y llego hasfa el cementerio. Todos los que me 'ven me dicen que se adzniran de que ande libre. Visito en la noche a Don Anaelmo. en– cuenfro allí al Ingeniero Fernando Larios, hijo de Juan Marcos, y sobrino del Obispo Ulloa y Larios. Larios me habla de una revolución en proyecto. Pa· rece muy antileonés.

NOVIEMBRE 23

A las 5 1 12 p.m. queda en libertad don Anselmo pero tiene que pagar una mulla de cien soles impues– ta por el Jefe Político por contravención a la ley de lmprenfa en vigencia.

NOVIEMBRE 26

Me llevan a la Momotombo

darle la instrucción necesaria para que sean buenos ofi– ciales y como es Ud. tan buen gramático ...

GUZMAN.-En mi vida he puesto escuela y por tan· to mal puedo· ser maestro. En cuanto a que sea un buen g1amlitico, es favor que me disj,ensa Su Excelencia. ZELAY A.~Lo veo un poco viejo, Don Enrique. GUZl\IAN.-No es que me veo, sino que ya soy viejo. ZELAYA.-Cllántos años tiene? GUZMAN.-53 años.

ZELAYÁ.-Diez más que yo. (Pausa), El señor Comandante de La Momotombo General ReiJlíling le dirá Ud. cuáles son sus obligaciones y las horas dedicadas a sus labores. Estará Ud. bajo sus órdenes y\ desde este momento está Ud. de alta }' sujeto a la disciplina militar. GUZi\lAN.-Estoy entendido y creo que puedo re-tirarme.

ZE1LAYA.-Ud. puede hacerlo.

GUZi\IAN.-Con su permiso, señor Presidente. ZELA y A.-Ud. lo tiene.

!'rIás de nn mes permaneció Don Enrique como Pro·

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