Page 36 - RC_1964_02_N41

This is a SEO version of RC_1964_02_N41. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »

· operación y en estado florecienie cuando r:

tocó al mismo don Adolfo Díaz, PO! rar!3– incidencia, entregar el poder al Parhdo Ll'–

~~ral sin dejarle un centavo de deuda a ±í– tulo de esoS empréstitos. Además, se nego-

la compra del muelle de Corinto y el di– Clero estaba ya depositado cuando asumió el n oder el General l-Aoncada y los in±erven±o–

~es no permitieron se hiciera el pago hasta que Mancada lo hiciera acreditál1dose el mé– rito de h~berlo adq':lirido cuando lo fue I?or negociaClon d~l Gob1ern~ de don Adolf~ DIaz con dinero deJado en caJa por ese GobIerno. En cuanto a la polífica internacional ya hemos visto cuál era la -situación que le tocó afrontar al régim.en del Presidente Díaz, pro– ducio de los antecedentes que he analizado, con base en documentos, al comienzo de es– íe breve ensayo. La obra del régimen de Díaz en relación con la intervención fue la de una hábil política que no solo logró sua– visar ésta sino transformarla en una política de cooperación amistosa que benefició al país porque mediante ella Se logró la r~cons­

.±rucción de sus finanzas recibidas en estado de ruina, la estabilidad política; monetaria, económica que pusieron las bases de las ad– minisfraciones posteriores, especialmenfe la primera del. General Emiliano Cha.mor.ro que fue reconocIda, aun por sus adversarIos po– lHicos, como una magnífica administración. Basta dirigir de nuevo la mirada al cuadro pavoroso, en todos los aspectos, que confron... taba el país, al recibir el poder el señor Díaz. Aun la docum.entación inco:mple±a del archi– vo de don Adolfo, que ha sido publicada, con cuidadosa selección por quienes se lo incau– taron ilegalmente, y aun con :mutilaciones de algunos de los documentos publicados, cOmo se noia por los puntos suspensivos, interca– lados en ellos, sustrayendo al juicio histórico el panorama completo pa.ra que la crítica pueda emitir un juicio justo, se nota que el Gobierno del Presidente Díaz tuvo que m.an– tener una continua lucha diplomáfica para tratar de obfener las m.ayores ventajas posi– bles para el país de parte de los intervento– res. Pero será sin duda terna más extenso

y de profundo análisis del Presidente Díaz y de su eminente colaborador. En cuanto al Tratado Cha:m.orro-Bryan que no obstante haber sido incorporado a la Constitución, en su parte más delicada, la que atañe a la sobe– ranía, por el régimen liberal, sigue siendo

n;o~ivo de diatriba -por los adicfos de este ;-efJ:nnen- contra el Presidente Díaz y sus lnfuY10S colaboradores en la política interna– cional, entre los que se cuenta el padre del autor de este artículo, don Diego Manuel Chamorro, será objeto de un análisis más ex– fenso sobre sus verdaderos objetivos y al– cances.

.Por aho~a es bueno hacer nofar que el PresIdente Dlaz, en su discurso en el ban– quete ofrecido al Secretario de Estado Knox, en ocasión a su visita al país en 1912, clara-

mente definió la a.ctitud de Nica.ragua frenfé a la intervención, actitud q-q,e consistía en lograr el respeto a nuestra soberanía me– diante una política de confianza que lograra ese respeto, única manera de tratar con los poderosos los países débiles y que acabó por lograr su objetivo.

Ese notable discurso en que colaboró en su redacción el Dr. Carlos Cuadra Pasos con– juntamente con el Ministro de Relaciones Ex– teriores, don Diego Manuel Chamorro, con– tiene este concepto fundamental, cuyos al– cances merecen una mediiación no superfi– cial: "Esa amistad sincera", dijo el Gober– nante Nicaragüense, entre el poderoso y el débil es en ambos meritoria. En el uno por el altruismo, en el otro por la confianza. Sí, señor, confianza ilimitada en la moral· ya probada del Gobierno Americano, y confian– za aun mayor en el pueblo de esa nación que en toda circunstancia sería' el primero y más enérgico defensor de la justicia de los débi– les aun contra su propio gbbernante". En ese condepto se encuentra la clave de la po– lítica del Gobierno del Presidente Díaz frente al poderoso vecino, si se medita con ánimo desapasionado y con penetrante y objetiva inteligencia. ~

Aspecto :muy importante que tiene q"ue ±omarse en cuenta para juzgar la política del Gobierno de don Adolfo Díaz es que al mis– :mo ±iem.po que se mantenía -la polHica inter– nacional de amistad con los Estados Unidos, y de cooperación en aquel1o~ ~spectos de in– tereses comunes y continentales que tenía por objeto primordial dar confianza, corno se ha dicho, al poderoso vecino para fqrnar la intervención en beneficio del país, se lle,vó a cabo paralelamente, una política cuUural y educativa de reforzamiento de nuestros va– lores espirifuales que. nos hacían invulnera– bles a cualquier debilitaIl1ien±o de nuestra nacionalidad. Esa polHica fue el apoyo que se dió a la iniciafiva privada en colegios re– gentados por Ordenes Religiosas, y ahora más que nunca necesita reforzarse y no po... nérsele trabas, si nuestro pueblo ha de ser salvado de ser arrastrado por la vorágine Co– munista que tiene corno objetivo máximo la destrucción de la civilización Occidental y

Crisfiana a que pertenece por herencia his– tórica y por vocación naci9nal.

Por otra coincidencia rara de la historia fue al m.iSInO Don Adolfo Díaz a quien tocó enfregar los destinos de. la nación al Parfido Liberal después de realizada la obra de re– construcción que le tocó iniciar en las peores condiciones en su prim.~r gobierno. En su úlfim.o Mensaje al Congreso Nacional dejó delineada, la obra de gobierno realizada y

los propósitos que guiaron al Partido Con– servador en el ejercicio del poeier, documen..· to que constituye el verdadero festam.ento político de Don Adolfo Díaz y que los lec±o– res de esta Revis±a Conservadora pueden vol– vér a leer en su número de Agosto de 1961.

-31--

Page 36 - RC_1964_02_N41

This is a SEO version of RC_1964_02_N41. Click here to view full version

« Previous Page Table of Contents Next Page »