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Bachiller a los Colegios p~rficuiaiés, auh cuari o

cio estos no fueran catól~cos, pero q.ue fueran cristianos y que sus ensenanzc:s se aJustaran a los principios morales reconocIdos.

Deseo también declarar que considero que en ninguna época los pCidres de familia han tenido tantas facilidades para conseguir becas para los Colegios de Segunda Enseñanza como las que obtuvieron en mi período administra– tivo, pues a nadie que la pidiera se le negó. LoS Colegios de los Salesianos, de los Hermanos Cristianos y, posteriormenfe, el de los JesuHas, estaban llenos de bequistas. La prosperidad de los Colegios mencionados se debió precisa– mente a eso. Lo atestiguo con ellos mismos, como iambién afesfigo con los padres de .fa– milia de aquella época que a ninguno, para darle una beca, se le pregunfó por su filiación política, esto es, si era liberal o conservador, pues ~o úni~? que se les exigía era de que fue– ran nlcaraguenses.

En el ramo de la economía nacional logré comprar el 51

% de las acciones del Ferrocarril

y también las del Banco Nacional, las que aun– que no co~seguí comprarlas todas dejé buenas

y sustanciales abonos hechos..

En el ramo de Fomen!o mI labor fue un po– co mayor. Emprendí los trabajos de carreteras, a las que ya hice referencia, además de los tra– bajos del camino a Juigalpa y La Libertad, trabajos que estuvieron a cargo de Mr. O'Rear– don.

Al capital extranjero le dí. toda clase de facilidades para sus inversiones en el país pero estando empeñado en la Pritnera G";le~ra M~n­

dial el capital tuvo muy poco mOVImIento In– ternacional.

A propósito de la Primera Guerra Mun– dial se recordará que durante mi período pre– sidencial rompimos relaciones diplomáticas con Alemania y sus aliados. Por el Decreto, Le– gislafivo de 18 de Mayo de 1917 se f~cuHo al Poder Ejecufivo para conceder al GobIerno de los Estados Unidos"el uso de los puertos, aguas territoriales, vías de comunicación y toda oira facilidad análoga" que fuera necesaria duran– te el conflicto. También se declaró que los súb– ditos alemanes residenies en el país podrían continuar en él sin ser molesiados en manera alguna, sujetos a la observancia y I'!3speto de las leyes y auioridades de la Repubhca. Ya hice referencia a mi actitud en este último respecio y a ella refiero nuevamente a mis lectores.

Así como le declararnos la guerra a Ale– mania así también firmarnos la paz con ella, para l~ cual Nicaragua envió corno Delegado a las Conferencias de Versalles a mi padre, don Salvador Chamorro, quien llevó corno Secre!a– rio al doctor Salvador Guerrero Montalván. Aunque el docior Salvador Guerrero Mon: talván había sido excelente colaborador de mI Gobierno en la Subsecretaría de Gobernación COn el doctor Rafael Cabrera corno titular, este nuevo nombramiento despertó cíel to inlerés en

Sentados: don Maltín Benald, Gl'a1. Emiliano ChamorlO

y don Salvador ChamOl'lO De pies: don Luis Valle y

don Alejandlo Ortega,

el Conservatismo que deseaba averiguar si el Dr. Guerrero Montalván pertenecía a nuestro Partido.

El Dr. Guerrero Monialván me fue presen. tado por el Dr. Rafael Cabrera, hombre que go– zaba de ioda mi confianza y esfimación y de quien estaba segur? le iniere,saba el bue? nombre de mi GobIerno, y aSl como fue el quien lo llevó al Ministerio de Gobernación, así fue él también quien me lo recomEmdó para la Secretaría de la Delegación a Versalles. El Dr. Cabrera me declaró con toda franqueza que el Dr. Guerrero Montalván era liberal pero que su preparación y honradez e:ansu,s prendas de garanií.a, las que, yo ,tambIén acepté como buenas. .

Debo confesar que a pesar de que hubo alguna inconformidad en mi Parpdq ~or el nombramiento del Dr. Guerrero Montalyan, és:– ie desempeñó su cometido brillantemente y mI padre quedó suma.men!e satisfe<;:ho de st: ac– iuación y guardó Sl?m:pre, para,el y su se~ora

esposa, doña OctavlanlÍa, la mas aUa es±lma~

ción, y yo mi~mo, desd.e enfonces, conservo las mejores relaCIones SOCIales con ellos.

A esa misma Conferencia de Paz de Versa. lIes concurrió el Presidente de los Estados Uni– dos, Mr. Woodrow Wilson. con sus famosos CA-_ TORCE PUNTOS, los que fueron aprobados por la Comisi6n de Paz Inlernacional pero que

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