This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »V1SJe en pipanie sobre el do y cl.espu~s de cuatro ho~
ras de camino a pie, llegaron por fin a "Guanagua–
na".1 lugar donde se encontraba su señora. La siiua– ción en que la encontró era verdaderamente alarman– ie. Presentaba heridas en la cara y los brazos, en las pienlas y en el cosiado y su estado era de suma gra– vedad
El relafo que le hicieron del incidente de su se– ñora fue el siguiente: Al salir el señor Moller para el Turna, doña María quedó en compañía de sus dos niños y de un señor danés, que era profesor, y a quien ella cuidaba. Una tarde llegó un individuo pi– diendo posada, lo que no le fue negado. Eran cerca de las seis de la tarde. cuando después de la cena, el profesor salió fuera de la casa a fumar su pipa De pronto la señora oyó un ruido extraño y sordo, corno el de un grito ahogado y un cuerpo que Se desplo– lt1aba Corrió afuera y vió con espanfo que el cuerpo del danés yacía en el suelo con la cabeza ±ol:alrnente cercenada Al misnto iiem.po vió que el hombre salía de entre un lt1atorral y se lanzaba sobre ella machete en mano, lográndole asestar heridas en la cara y los brazos, las piernas y el costado Ella corrió hacia la casa y pudo cerrar la puerta, desapareciendo el hom– bre en la oscuridad. Nadie le ayudó. nadie la soco– rrió, nadie la acompañó sino sus hijiios que por pe– queños no hacían más que llorar, estaban completa– rrteníe solos No fue sino hasta varios días después que acertaron a pasar por allí unos daneses, quienes enviaron mensajeros, entre ellos el indio sumo, para que le avisaran al señor Moller del percance Este llegó muchos días después del asalto. Las heridas es– laban infectadas y el estado de la señora era gravísi–
mo.
A los pocos días de la llegada del señor Moller~
para colmo de males, se vió aiacado él mismo de ma_ laria, así fue cómo el trayecto de "Guanaguana" a Matagalpa fuvo que hacerse a hombros de indios que llevaban a los dos enfermos en hamacas. Tres largas semanas duró aquel viaje.
Una vez llegados a Matagalpa, se alojaron en casa de la familia Tenorio, donde vivía don Guillermo Gron -dueño después del Restaurante Dina:rnalca en Managua- quien llamó al doctor Salazar para que atendiera a los enferrnos Después de una esmerada atención médica, la salud de doña María logró resta– blecerse, habiendo, sin embargo, quedado con cicairi– ces visibles y penn.anenfes en la cara y en los brazos,
y un cierío marcado impedimento para andar, efecto de las heridas en las piernas, especialmente una en la rodilla derecha, que le rompió la rótula
También el señor Moller :rnejoró de la fiebre y del desgaste físico en que se encontraba Habiendo recuperado un poco su salud, fue en co:rnpañía del señor Gran a "Guanaguana" donde habían dejado to– dos sus enseres, encontrando a su llegada que la casa había sido saqueda de gran parte de ellos Entre las cosas que encontraron estaba una znáquina de coser que fodavía conservan De lo que pudo vender, pues estaban sin fondos, pudo sacar la exigua suma de veinie córdobas Con esa pequeña suma comenzó el señor Moller a trabajar
A la muerte de don Diego Manuel Chamorro as– cendió a la Presidencia de la República don Barlolo– mé Mariínez, oriundo de Matagalpa, quien sabiendo de las innumerables calamidades que habían sufrido los inmigrantes daneses, y no creyendo en la impor~
faneia, ni en las venfajas de la misma inn1igración,
les ofreci6 ei pasaje de regreso a Dinamarca.l o ciento cincuenta dólares a aquellos que prefirieran quedar.
S0, a trabajar en lo que quisieran
El señor Moller, - y el señor Gran, entre los po– cos que prefirieron quedarse-, dispuso aceptar los ciento cincuenta dólares, los que unidos a los veinie dólares (el córdoba estaba entonces a la par del dó.
lar) de la venia de las pocas cosas que les habían
quedado, constituían todo su capital
Con parle de ese dinero cOlUpró el señor Moll er algunas herramientas de carpintería y comenzó de
nuevo a ejercer su oficio El Presidente Marlínez le ofreció el irabajo de reparar el cielo raso de su casa en Maiagalpa Allí Se ganó diez dólares Luego hizo una mesa para el señor Alejo Sullivan, padre de las señoriías Sullivan muy bien conocidas y apreciadas en Matagalpa, y se ganó ofra pequeña suma. El Se~
ñor Sullivan le ofreció frabajo en su hacienda "Bella Vista" 10 cual aceptó Luego el señor Juan Davis le dió el trabajo de reparar su casa en el Mineral "La
Leonesa". lo que también aceptó Estaba en este oH. eio cuando nació su tercer hijo, Wa1±er.
En Febrero de 1926 se traslada al "Guapotal".1 El
emprender irabajos agrícolas en sociedad con don Juan Davis Allí sembró 100,000 árboles de café y
consiruyó su casa en la que se insialó COn su familia en el siguiente mes de abril En Mayo de ese mismo año cOlTIenzó la revolución constitucionalisfa, llama–
da de Moneada, mas las tropas conservadoras y li_
berales que pasaron por esos lados, jamás molesfa– ron ni dañaron en forma alguna la propiedad de los Moller. Por este tiempo nace su cuarto y ú1±irno hijo, de nombre Ricardo
Enseguida comienza la época del bandolerismo. Los marinos norteamericanos establecen un campa– luenio cerca de la propiedad para protección de iodos los extranjeros establecidos en esa región. Después aquellos fueron relevados por la Guardia. Nacional. La situación económica del país es deplorable. La baja del precio del café en el mercado mundial lleva a la quiebra la sociedad formada por los seño– res Moller y Davis Esto sucede en el año de 1935
La familia Moller dispone regresar a Matagalpa donde establecen una venta Así transcurren dos años hasta que don Ball:o (WalterJ Fraumberg propone al señor Moller la administración de su ha.cienda "San Francisco", lo que él acepta. Se lraslada junto con su
familia y es allí donde aC±uahnente vive Su situación económica ha mejorado noiablemente
En. 1946 com.pró la hacienda llamada "Bella Visia", en 1948 la hacienda "Las Mercedes" y en 1949
"Veracruz", las que unidas forman una sola propie– dad dedicada al cultivo del café, la que vendió a su
hijo Walfer, su dueño adual, quien se casó con la se–
ñorita Tomasa Sáenz
En 1950 co:mpra "La Suiza" la cual vendió en
1958 a su hijo Ricardo, casado con Doroihy Pefersen, señoriia de origen danés
En 1956 compra "Wilwaska", si±uada en Sébaco, hacienda de ganado que actualmenie a.dministra su
hijo mayor, Gunnar, quien se cosó con la señorita OIga Herrera
La hija mayor, Lilly, es casada con don Carlos Eger, y ambos son elementos apreciables de Esquipu– las, -donde residen-, y en Matagalpa
Esia es la historia de los Moller, de Mafagalps, últimos sobrevivienfes de la inmigración danesa
This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »