This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »Partido Conservador, que apoyaba por la misma causa tibiamente al Gobierno"
Por este tiempo estaba encargado del Ministerio de la Guerra el senador don Pedro Joaquin Chamorro, en lugar de don Anselmo H Rivas, quien, viajando pa– ra Granada, se frocturó un pie, y allá permanecía invá– iido Ambos constituían el elemento conservador influyente en el Gobierno de Guzmón y los que mante– nían la lucha contra las intrigas de los montañeses La mutua desconfianza fue creciendo, y de ella nació el resentimiento de Guzmán contra aquellos dos hombres, como puede apreciarse de los siguientes docu– mentos hasta ahora inéditos
'''Managua, Julio 16 de 1869. Sr. Dn Anselmo H Rivas. Granada
"Mi estimado amigo
"Me parece inútil decirle que difícilmente habrá una persona más interesada que yo por el triunfo del Gobierno Su causa es la mía más que de ningún otro En el derrumbamiento de la administración ac– tual irja envuelta mi fortuna, si es que algo tengo, mi porvenir, mi nombre y tal vez mi cabeza Todo esto es tan sabido que hasta parecerá insulsez de mi parte el repetirlo; pero los tiempos que corren son tan diver– tidos, que no sería extraño el que mañana aparezca don Fernando Guzmán conspirando contra el Gobierno, y cuando menos lo piense se vea encausada, persegui– do y amarrada por trostarnador del arden público. "Como Ud debe haberlo adivinado ya, este pro– loguito va derecho a la supuesta conspiración de Rivas, esa ridícula y escandalosa comedia que ya pica en sai– nete y tiene avergonzadas y mohinas a todas las per– sonas honradas
"U na se figura, don Anselmo, la mala impresión que ha producido aquí ese malhadado complot Mi tata no quiere oir hablar de él, los Ministros están desorientados, lelos, y la turbamulta de muchachos
sin juicio, en cuyo número me cuento, se reiría a car–
cajada tendida, sino fuera que este no es tiempo para burlas tan pesadas.
"Yo he juzgado a U siempre un hombre leal como pocos me complazca en reconocerlo y en decírselo Además, conservo por todos mis maestros una especie de respeto mezclado de simpat,a, sobre todo cuando en ellos encuentro, como en U talento, honradez y cierta elevación de miras poca común en nuesro país Esto me basta paro estar seguro de que U es entera– mente extraño a lo que está sucediendo en Rivas U ve desde su palacio del "Duende" la decoración y la far– sa, y quizás se ha dejado sorprender como muchos,
como yo mismo en los primeros momentos, en la
lI
ober_
turo" si U gusta Pero, amigo, aquí no e~ un misterio
para nadie lo que pasa en las cau/isses, y dígase lo que se quiera, tales procedimientos ceden en mengua del Gobierno, cuyo buen nombre veo comprometido con estos indignos manejos
"Quizá habría sido creíble la historia de la dicha conspiroción, a no haber levantada el Gobernador de Rivas una lista tan enorme alli encuentro a Rafael Pasos, Ireneo Delgadillo, Devid L. Murray, Dña Con-
cepción Sáenz, &, &, y para colmo de escándalo, a Mi– guel Vijil, Enrique Guzmím y Faustino Arellano como principales promotores del trastorno.
"Mi correspondencia y la de Faustino son objeto de rigurosas pesquizas, y se las viola en la estefeta de Rivas con la mayor impudencia. Lleven las denuncias a Estrada y a mi tata contra estos dos insignes traido. res, y si no comprenden todo lo que tiene de estúpida semejante conducta, se empeñan en hacer creer al Pre: sidente que su hijo lo vende, y al Gral en Jefe que va a ser degollado por el más íntimo de sus amigos. "Créame U , don Anselmo, a veces me figuro que los hombres de Granada y de Rivas se están volviendo locos Nunca me imaginé que llegarían o tal grado de insensatez Y para no perder todas mis ilusiones, quiero creer que no son las persqnas verdaderamente notables quienes llevan la voz en esta que ya pasa de
broma, sino que¡ como sucede con frecuencia, partlctJ~
larmente en Granada, el payasismo insolente y demen– tado, viéndose en el apogeo de su poder, está ahora haciendo de las suyas
"Pero la verdad sea clicha, tqdo esto nos Conduce a la perdición Vamos mal, muy mal, ysólo hace– mos el negocio de Jerez
"Yo tengo fe en U , en la rectitud de sus inten· ciones y en la influencia que justamente debe ejercer sobre toda aquella gente para hacerla que cambie de rumbo
"Trotor de revivir antiguos odios; recalentar los ánimos, poner o flqte a miserables pasioncillas que vi– ven en el fango, prevalerse de las circunstancias poro ejercer ruines venganzas, no son los medios de dar fuer· za y prestigio a nuestra causa Yo sé hasta qué gra– do de anarquía podriomos llegar por tal camino "Aunque inválido, puede U. hacer mucho, su voz es muy autorizado y sus buenos deseos sobre todo le darán aliento pord uno empresa ton histórica ..
l/Un paso} amigo, uno siquiera aunque sea c;on
muletos y habrá prestado U un gran servicio a la cau– sa del Gobierno.
"Quiero que U me crea y se persuada de la gra– vedad de la situación Esto puede convertirse de un momento a otro en un campo de Agramante, si las rumores del aposento llegan a trasmitirse hasta el Ejér– cito
"Que concluya de una vez para siempre la farsa de Rivas, esa comedia que no tiene nombre en el dic– cionario de las torpezas, ni más ejemplo que la céle– bre "panteoneña" de D. José Guerrero el 29 de Mayo de 1863 Que ocupe cada uno el puesto que le co– rresponde, que se releQuen a la última fila los juglares estultos y VOCingleros y que los hombres prominentes hagan un esfuerzo supremo para salvar al país, aho– gando las meticulosas susceptibilidades de nuestros amigos.
"Por lo que a m¡ toca, me encontrarán siempre dispuesto a olvidarlo todo, a sacrificarlo todo, hasta mi amar propio, y a trabajar con los míos para que se co– loquen en la misma línea que yo
"Quedo comq siempre su afectísimo amigo.
Enrique Guzmán".
A esta carta contestó don Anselmo H. Rivqs el
-lQ-
This is a SEO version of lista_historica_magistrados. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »