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« Previous Page Table of Contents Next Page »al Señor Ministro Chamorro toda la parte que le co· rrespondía en el Protectorodo Americano en Nicaro-gua He aquí dicho artículo
"A cada uno lo suyo"
'-'En días pasados circuló en hoja suelta impresa después de haber sido publicado en este diario, sin co– mentarios, el dictamen que el honoroble Senador Don Rito Sáez, emitió como Miembro de la Comisión del Senado, encargado de estudiar la Memoria de Hacien– da y Crédito Público presentada por el Señor Ministro Don Eulogio Cuadro en la Legislatura de Nicaragua en sus actuales sesiones Al pie aparece una nota en que, equivocadamente se quiere hacer rspensable de
la ruinosa situación económicd en que se encuentra
Nicarogua al Partido Conservador. Esta es una fla– grante injusticia
"La ruina de Nicaragua no es obra del Partido Conservador, el cual fue, hasta cierto punto separodo de la gestión de la cosa pública a míz del triunfo de la Revolución de octubre de 1910, con la disolución de lo Asamblea Nacional Constituyente Esta Asamblea estaba compuesta de hombres independientes y pro– bos e incapaces de dictar ley alguna que comprometie– se la Soberanía Nacional y por eso precisamente fue disuelta a instancias del Señor Ministro Americano, cuándo ya estaba firmada la Constitución de 5 de abril de 1911 que es el verdadero programa del llevado y traído Partido Conservador, y cuando después de haber sondeado a varios de sus miembros más impor– tantes se convenció el círculo pequeño del cOnserva– tismo, abandonado en los brazos del Ministro Ameri– cano, que esos hombres no eran ihstnimentos propicios para el desarrolló de sus traidore~ fines
"Ese pequeño círculo, cornpuestó de los Señores Pedro Rafael y Eulogio Cuadra, Don Diego Manuel Chamorro, Don Alfonso Ayón, Doétor Móxirno H Zepeda, Dector Salvador Castrillo h , y otros, forman el consejo áulico que desde entonces viene disponien– do a su albedrío de los destinos de la Nación, apoya– dos en las bayonetas americanas que ocupan el Campo de Marte, El Partido Conservador en su inmensa mayoría ha protestado indignado y enérgicamente con– tra el actual orden de cosas, el dictamen mismo del Senador Sáez es la prueba elocuente de la actitud patriótica, de uno de tantos; y 1'\0 sólo Sáez ahí está en la misma agrupación independiente, el Doctor To– ribio Tijerino, que protestó enérgicamente contra los Empréstitos desde 1911 y que prefirió ser preso por los fuerzas americanas que habían desembarcado en Corinto a raíz de lo Revolución de 19.12, antes que dar un Acuerdo como lo pretendla el Cónsul, dejando en poder de éstos aquel puerto El Doctor Tijerino lanzó valiente protesta ante los Gobiernos todos, por ton inaudito atentado, pues él como Delegado del Eje– cutivo en Occidente representaba la Soberanía Nacio– nal. Ahí está la respetable figura del Doctor Adán C<irdenas, reliquia preciosa de los· célebres treinta años, retirado por completo a la vida privada antes que tomar parte en la afrentosa política nicaragüense Ahí están también los honrados y patriotas Tomás
Martlnez y Doctor Joaquln Gómez, eminentes miem– bros de este partido, que arrojaron sus Carteras de Relaciones y de Gobernación antes que autorizar con sus firmas Contratos desastrosos y humillantes que pa– nen a Nicaragua en lo más triste condición de pueblos envilecidos. Am está el Señor Ministro de Hacienda Don Manuel Lacayo, que del mismo modo abandonó su sillón ministerial por no autorizar los desfalcos que en grande escala comenzaban ya a verificarse
"No es, pues, la generalidad del Partido Conser– vador de Nicaragua el responsable de la situación de aquel país, sino la cobardía y la demencia del consejo áulico que mantiene al Presidente Dlaz en un círculo estrechlsimo de hierro, y el cual despreciando la opi–
nión pública, cree que para sostenerse en el Poder no
hay mejor medio que conceder a los Americanos todo y aún más de lo que les piden
"Conozcan, pues, los centroamericanos a tos ver–
daderos responsables de la triste situación de Nicara– gua, que hoy implora la protección de sus hermanos del Is~ma, para ver de conseguir libertarse de tan omi– noso yugo, que se lo han puesto para mayor vergüenza
unos pocos nicaragüense desnaturalizados"
A T M
De la trascripción anterior se desprende que las pocas excepciones honrosas del Partido Conservador
nicarqgüense, que hemos mencionado en otro lugar,
rechazan indignadas la complicidad que pudiera su– ponérseles en la obra antipatriótica de sus correligio– narios en el Poder, y procuran con celos plausibles ex– culpar a la agrupación política a que pertenecen de las_ responsabilidades históricas que la posteridad le deducirá
Ellas no están de. acuerdo con el Señor Ministro Chamarra, en que sea misión civilizadora y humani– taria la que ejercen en Nicaragua nuestros protectores
norteamericanos; ni menos en que seo benéfico para
nosotros ese protectorado rudo que nos importó la Re– volución de 1910, y del cual dijo el finado Dr Cárde– nas, al Dr Salvador Mendieta, en Puntarenas, que era un clavo ardiente de que tenía que asirse el Partido Conservador para recuperar el Poder perdido en 1893
Perdonará el Señor Ministro Chamorro que ha– yamos sido tan extensos para contestarle todas y cada
una de las aseveraciones inexactas de su sensacional
Conferencia; pero no hemos podido menos porque osi lo exigla la gravedad del asunto y también nuestro deseo de poner las cosas en su lugar y dar al César lo que es del César, o mejor dicho al propio Señor Minis– tro Chamarra, lo que le corresponde legítimamente en la Intervención que hoy tienen los Estados Unidos en los asuntos interiores de Nicaragua, y de lo cual ha hecho alarde en otras ocasiones con la franqueza del que está enamorado de su propia obra
CONSEJO DEPARTAMENTAL
Liberal Nacionalista de Managua
Managua, diciembre de 1916.
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