This is a SEO version of RC_1967_06_N81. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »<;ranada, vol6 precipitadamente a Italia, para ver par
la post/era vez al santo varón que dejaba tras sí una
luminosa estela de virtudes Aun encontró el cadá–
ver expuesto en capilla ardiente, y ante él se postró de hinojos musitando LIno cración Al incorporarse,
se dirigió a ella un joven obispo de los allí presentes,
e! cual en perfecto castellano le dijo "Su ruego ha
sido escuchado¡ fa casa salesíana será establecida en
Granada" Aquel obispo era Monseñor Juan Cagliero, el misionero ilustre en SU! América y civilizador de los Indios Patagones
La limitación del personal, por entonces 110 tan
abundante d.e Jo Institución, privó a Doña Elena por
varios arios de la satisfacción de sus ideales
A principios do 1902, emprendió Doña Elena el viaje para El Salvador, paro tratar con el Padre Mi– sieri, Inspector Genoral de los Salesianos en Centro Amél ica, acerco de 10 llegada a Nicaragua de los Hijos de Don Basca Sin embargo, los desconfianzas justqs y razonables que inspiraba el régimen gubernativo im–
peronte en el país, demol aran por cilgunos años el es–
tablecimiento de la cosa en Granado Pera desapa–
recido ese peligro, con el triunfo de la revolución de
1909, Doña Elena volvió a El Salvador a cambiar ideas con el Padre Misieri, éste se encaminó a Italia y desde
ailí le en.unció que el su regreso a Nicaragua traería el
rersonal necesario para encargarse de la casa de Gra–
nada Tuvo neticias Doña Elena de lo fecho en que
tocaría el vapol en Corinto, que conducía al Padre
Misieri y los otros sacerdotes que regentarían el Cole–
gio de ¡'Juan Bosco" y oportunamente se personó en
el puerto a esperarlos para conducirlos o Granada Al
verlos sobre la cubierta del barco, su corazón se estl e–
meció de gozo al pensar que el sueño por ella y por su
hermana Luz tuntas veces acariciado, iba a trocarse
por fin en grata y hermoso realidad Pero el Señor quiso probarla, y como Dios a Moisés, le mostró desde el m,mte Nebo, la tierra de promisión, pero le dijo que
no entralÍa en ella, así también Dios le mostró a Doña
Elena lo comunidad de Padres Salesianos que llegaron
a COI into, para encOl garse de la casa de Granada, pe–
ro tuvo que contentarse con verlos, sin poder gozar de
verlos establecidos en Jo ciudad
Sube gozosa al puente del vapor a saludar o los Padres, pero se llsvó un desencanto El Padre Misieri le dijo al oído que teda había flOcasado, porque el IlustiÍsimo Señal Obispo Perei,a y Castellón le había
comunicado su firme resolución de no permitir en su
diócesis (que entonces ero toda Nicaragua) el estable– cimiento ci" lo Coso Salesiana Cualquiera puede
imaginar el hondo sufrimiento que llevó a
su espíritu,
la determinación del Prelado Pela he Clquí un rasgo revelador de la envidiable discreción e imponderable
respeto de Doña Elena a Dios y a sus ministros murió sin participar a nadie, la determinación incomprensible del Señor Obispo
Doña [,lena dejó de existir el 11 de Octubre de 1911, desde el cielo consiguió del Señor a quien ton cerca tenía lo que tanto habíCl onsiado en la tierra A
los cinco meses de su tr6nsito a mejor vida, en el mes
de Marzo de 1912, llegaba o Gronada, lo pequeño comitiva formad,o por el Reverendo Padre Don José Misieri, el Pbro José Dini, el estudiante Jor\je Muller
18
y el Hermano Esteban Tosin!. Con este escoso per– "anal se abrió el Colegio "Son Juan Basca" el 15 de Mayo de 1912
Doña Luz Arellano fue la que dio una hermosa casa bien amueblada en el barrio de Jalteva poro poder comenzar alli mismo el Colegio, añadió terrenos donde
poder constl uir futuros edificios¡ que son los que ac– tualmente existen
Por todo esto, lo Institución Salesiano considera a Doña Luz como cofundadora del Colegio de San Juan Basca d." la ciudad de Granada, juntamente con su hermana Elena.
DOÑA FLENA, MADRE DE LOS POBRES
Y DE LOS ENFERMOS
Le parecerá o alguno que la único actividad que desplegó Doña Elena se redujo ó la cristiana educa– ción de la niñez y de la juventud, pero ejerció también otras actividades en pravecha de las almas y de los cuerpos que la hicieron agradable a Dios y amable a los hombres La gente del pueblo la llamaba cariño–
samente ",V\amé Elena"
La Casa de Huérfanas -Los cClsas de las familias acomodadas de lo ciudad de Granado, como lo era la caso de lo familia Areilano, eran amplios y hermosos,
con patios interiores, 10lgos corredores que protegen
a sus moradores del sol y de lo lluvia Quien por pri–
mera vez visito estos CQ;SOS recibe una agradable sor–
presa por lo holgadas que resultan En una de estos casas fundó lo que llamaron La Casa de Huérfanas,
pela que tenía un radio de acción mucho más amplio
que el que se suele dar a la denominación de esos co– sas
La cosa de huérfanos era la casa donde se ofre– cia ayuda a todo muchacho que lo necesitara Era una escuela de artes y oficios paro muchachas pobres, donde al mismo tiempo que aprendían los primeras letras adquirían la destreza en los oficios propios de la mujer Muchas jóvenes pobres tenían en dicha
casa cuanto necesitaban para realizar sus labores en
los oficios a que se dedicaban, ya fuera paro las que amasaban harina, o para Is que molían cacao tostado y lo mezclaban con maíz Todos usaban el local, los
rocinas, los muebles, lo mismo que los hornos, siempre que los necesitaran
La casa de huérfanas no era sólo para las niñas
huérfanos, servía también de refugio a todos los des–
graCias femeninas, era el seguro puerto a donde se
acoglan contra los asechanzas del mundo, todos los mujeles en peliglo, lo viuda perseguida, lo doncella asechada, la mujer arrepentida que vuelve sobre sus pasos, 1" hija natural que no puede entrar por lo puer– la pi incipal en la caso de su podre, todas, toditas ellos, Se refugiaban en Doña Elena como en los brazos de
una madre, y, cosa extraña, mujer la más severa con– sigo mismo¡ fa más virtuosa, era a Jo vez 10 más tole–
rante e indulgente con la pecadora arrepentida, con
tol que se alejara de Jos caminos del mdl
r
con firmeza
y constancia
Todas las semanas se amasaba en su cosa gran cantidad de pon paro repartirlo entre los pobres, tam– bién compraba grandes cantidades de arroz, frijoles,
This is a SEO version of RC_1967_06_N81. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »