This is a SEO version of RC_1967_07_N82. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »CON MONOGRAMA DE FAMILIA
Establecidos en Granada en 1829, los progenito– res de esta familia, cien por ciento franceses, vinieron pues a encontrar establecidas en el Nuevo Mundo, una serie de costumbres españolas -entre las que desta– caba con preponderancia el buen comer-, emanadas de antepasados que conocian los secretos de la buena mesa, como manero de agasajar y sostener relaciones sociales Un hidalgo español se preciaba y cuidaba tanto de su honra y de su vestido, como de las exce– lencias de su meso y en esto último era en extremo puntilloso
Los franceses no le iban a la zaga a los españoles en ésto y cultivaban el buen comer en escala tan apre– ciable como aquellos, y tonto unos como otros ponían énfasis especial osi, en la calidad como en la cantidad de la comida, según los usos y costumbres de sus anti– guos dominadores, los romanos Todavía hoyes algo natural en Francia y en España, el hacer cinco tiempos de comido en el día, en lugar de los tres que se usan actualmente Desayuno temprano, en la cama, en– tre 6 y 7 de la mañana, consistente, por lo general, en una toza de chocolate humeante y espeso, acompaña– da de panecillos de Brioche con mantequilla Almuer-
Fue costumbre inveterada de numerosas familias granadinas el continuar la tradición europeo de man– tener la mesa de su casa, no s610 bien servida y aten– dida, sino también exquisitamente variada En tiem– pos de la Colonia, durante todo el Siglo XIX, y todavía o principios del Siglo XX, ero común y corriente, entre las familias que se contaban por principales en esta ciu– dad de Nicaragua, el agasajo constante y señorial de las mismas hacia otros miembros de aquella sociedad, que se traducía en recepciones, fiestas y banquetes, en los que se hacia gala y derroche de hospitalidad y buen gusto Parte de la herencia que legaran nues– tros antepasados españoles, entre quienes descollaban los andaluces por su trato amable y cortés, fue la cos– tumbre, por demás arraigada, de aparecer como per– fectos anfitriones, y de saber brindar además de amis– tad y cortesía, los deleites de una buena mesa
CUCHARA UNA
apodo, en tcd forma que llegan a ser más conocidos por el apodo que por su nombre, si es que este último no es olvidado completamente.
También a sus empleados les ponen apodos y en algunos casos les cambian el nombre por completo. Por eiemplo: Si una empleada se llama Carmen, le dicen Lucrecia. Llega ella a acostumbrarse tanto a que la no–
men Lucrecia que cuando va dé visita a su pueblo ale·
90 que no se llama Carmen sino Lucrecia Este cambio de nombre tiene siempre alguna conexión con los re– c::uerdos y las semeicanzas. Si el patr6n o la patrona conocieron en una época lejana a alguna persona lla– mada Lucreda que se parece en alguna forma a la em– pleada, entonces el cambio de nombre es justificado y perfecto
Los descendientes de Don Emilio Benard Doude son en totol 167 sin contar los c6nyuges y sus hijos, (séptima generación) Sobra decir que este extenso grupo es su– ficiente para llenar un salón de f;esta de tamaño gran– de La familia Benard es extraordinariamente unida, y
con culto especial a sus parientes. Siendo una prole tan numerosa se creería que no tienen necesidad de con– fraternizar fuera de ellos mismos, sinembargo, no es así. A como es de grande la familia, son de numerosas sus amistades, y de todas las escalas sociales. Confraterni· zan igual con el pobre que con el rico. Son estrictos con
SU5 hijos, y gustan hacer matrimonios de alcurnia, pero al mismo tiempo son generosos y buenos con sus semejantes De profundas raíces Católicas las muieres Benard son caritativas y piadosas y al mismo tiompo ha– cen el meior uso posible do su dinero
No se conoce a un Benard malo o deshonesto, o que sea odiado por alguien En pocas palabras, esta familia es amada y respetada por todos
Tanto hombres como mujeres gustan de las de– licias de la comida buena, y de las fiestas alegres y
deslumbrantes, en donde adoran ni dios Buco con liber–
tad
Por conviccián e ideales, más que por tradición, han pertenecido siempre al partido conservador de Ni– calagua y varios de sus miembros han tenido una ac– tuación descollante dentro del partido Don Emilio Be– nClrd Doude murió siendo Ministro de Hacienda durante
el gobierno del Gral. Joaquin Zavala después de haber
desempeñado el mismo cargo durante el gobierno del Gral Pedro Joaquín <:;hamorro cuando fué pre~candidato
a la Presidencia de la República para el siguiente perío. do, por deseos de nluchos amigos y del mismo Don Pe–
dro Joaquin. Don Adolfo Benard Vivas y Don Emilio
Chamarra Benard, fueron contrincantes políticos de los Generales José María Mancada y Anastasia Sornoza Gar– cía, en las elecciones de 1928 y 1950, respectivamente Permítanme decirles que en 1942 la revisJa "Selec– ciones" publicó un artículo en donde decía que las mu· jeres más bellas de Centro América provenían de Gra– nada, Nicaragua. Esto sin duda alguna se refería a la sexta generación de Benares. Lo afirmo así, porque si buscamos en el árbol genealógico, el noventa por ciento de las familias prominentes de Granada llevan el ape· llido Benard Aunque desde ese tiempo acá la mayoría haya emigrado a Managua.
Hablando en pasta, la cosecha de mujeres bellas de la sexta generación es famosa. En $i los Benard son famosos en todo Nicaragua por su sensitividad, sus pintorescas fascetas y sus virtudes
46
This is a SEO version of RC_1967_07_N82. Click here to view full version
« Previous Page Table of Contents Next Page »