¿Hacia dónde se dirige Centroamérica, política y económicamente?
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Si no sabemos de dónde venimos y hacia dónde
queremos ir, no llegaremos a ninguna parte y
tampoco llegaríamos a vivir con dignidad.
EBG
¿Qué hemos hecho con nuestra libertad?
- En 1821 nuestros tatarabuelos nos dijeron: “ya somos libres”.
- Veloz nació la rivalidad fratricida entre liberales y conservadores, León y Granada.
- No se sabe cuál de los dos bandos o partidos se siente libre de pecado. Ya ni importa.
- Recibimos grandes ventajas y riquezas naturales, pero siempre hemos vivido en pobreza por no dedicarnos a trabajar y ordenar nuestra casa.
- Por dedicar más tiempo y esfuerzos en pleitos, perdimos El Guanacaste.
- No pretendo hacer recriminaciones ni denigrar a mi querida Nicaragua.
- Lo esencial para este foro es conocer la verdad histórica de la situación en la que siempre ha vivido Nicaragua. Solo diagnosticando la enfermedad podremos llegar a conocer la cura.
- Si vemos el PIB per cápita como índice de desarrollo o de bienestar de la población, tanto Guatemala como El Salvador, Honduras y Nicaragua estamos en los últimos lugares de América Latina. Nicaragua, en general siempre ha seguido en el último lugar (excepto Haití, que es del Caribe).
¿Cuál ─creo yo─ que es un hecho importante de esa verdad histórica?
- Los historiadores están de acuerdo en señalar que en todas las épocas ─sin excepción─ desde 1821 hemos tenido guerras (llámense revoluciones, asonadas, sediciones, golpes de Estado, etc.) con el objeto de derrocar al gobierno de turno: quitate vos para ponerme yo.
- Todas han sido para alcanzar o preservar el poder, simbolizado en el sillón del gobernante (llámese presidente, jefe de Estado, jefe del ejecutivo, etc.). Es el ansia de los caudillos y aspirantes a caudillo de sentarse y atornillarse de por vida, si posible, en ese sillón.
- Yo he notado similitud entre la intimidación del asaltante que exige “la bolsa o la vida”, con la de caudillos políticos que amenazan con hechos que exigen “el poder o la guerra”, para “quitate vos para ponerme yo o te hago la guerra”. También, “no te atrevás a querer quitarme el poder, porque te hago la guerra”.
Doce constituciones
- Hemos abusado de la creación de constituciones, que más han servido para alcanzar y perpetrarse en el poder. A todo lo largo de nuestra historia ha significado caos institucional.
- En 1838 nos separamos de Centroamérica y llegamos a ser un país soberano. Desde entonces hemos tenido diez constituciones formales y dos provisionales. Las diez formales son las de 1838, 1858, 1893, 1895, 1912, 1939, 1948, 1950, 1974 y la de 1987.
- A la vez, estas diez constituciones sufrieron veintidós reformas parciales.
- Las dos constituciones provisionales son: la Provisional de Garantías de 1910 a 1912 y el Estatuto Fundamental de la República de 1979 a 1987.
- Adicionalmente, se crearon cinco constituciones llamadas “non natas”, porque no se aplicaron. Las de 1842, 1854, 1898, 1911 y 1913.
- Todo esto es señal de caos.
- Una nueva constitución crea una nueva república en la que nadie ha sido electo gobernante y cualquiera que sea electo lo es por primera vez en esa república. Así no existe la reelección.
- Con este ardid se reeligieron José Santos Zelaya, Anastasio Somoza García y Anastasio Somoza Debayle. El golpe de Estado también es otra manera de llegar a sentarse en la silla del poder.
- Todas las diez constituciones formales prohibían la reelección, excepto la última ─la de 1987─ que la permitió sin ninguna restricción. Pero en 1995 el gobierno Unión Nacional Opositora-Violeta B. de Chamorro restringió la reelección a una sola vez, pero solo cuando fuera alterna. En las reformas del 2014 se quitaron esas restricciones y ahora es permitida para siempre.
Otro factor importante: las amnistías
La mayoría de estos delitos cometidos por nuestros pleitos con sus correspondientes crímenes, han sido olvidados con amnistías oportunas que fueron otorgadas desde la N° 1 por Juan Argüello en 1829, hasta la N° 52 por Arnoldo Alemán el 12 de julio de 2000. Esto da un promedio de una amnistía cada cuatro años. Todo ha quedado impune para poder volver a delinquir por primera vez. No hemos salido de este círculo vicioso.
¿Qué hemos hecho en los últimos años?
- En los años 1970 iniciamos las dos últimas guerras, una tras la otra. Ambas ayudadas por las dos grandes superpotencias en la Guerra Fría: la Unión Soviética y los Estados Unidos. La primera para derrocar la dinastía Somoza e inmediatamente después la segunda para recuperar la democracia occidental.
- Al final de estas dos guerras en 1989, el PIB per cápita había bajado a los niveles de mediados de la década de 1940. Desde entonces solo hemos podido recuperar a los niveles de bienestar o malestar que teníamos a mediados de la década de 1950.
- Una vez derrocada la dinastía Somoza con la guerra de los años 1970, iniciamos un proceso marxista-leninista que en 1987 había avanzado la mitad del camino en la creación del capitalismo de Estado.
- Ese proceso marxista-leninista fue vencido por la coalición Unión Nacional Opositora (UNO)-Violeta Barrios de Chamorro en las elecciones de 1990 que forzaron las hermanas repúblicas centroamericanas junto con otras democracias occidentales. Pero desde entonces hasta hoy permanecemos estancados en un pobre desempeño económico apenas al nivel de 1955.
- En 2000, el presidente Arnoldo Alemán, caudillo del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), firmó un pacto con el secretario general del FSLN, Daniel Ortega, en el que Alemán obtuvo una diputación automática al finalizar su período, y Ortega obtuvo la posibilidad de ser electo presidente de la República con solo el 35% de los votos (su promedio histórico).
- Así Alemán llegó a la presidencia de la Asamblea Nacional en 2002 para seguir cabalgando en el poder, mientras Ortega, por otro lado, pudo regresar con 38% de los votos a la presidencia en 2006.
Porque Nicaragua me importa
- En la década de los ochenta participé como presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) en la defensa de los valores democráticos occidentales y, por mi firme defensa, en 1985 fui injustamente castigado por el régimen sandinista con la confiscación de todos mis bienes.
- En 1996 acepté acompañar a Arnoldo Alemán como candidato a la vicepresidencia de la República y salimos electos. Desde ahí aprendí que el que no gobierna para servir, no sirve para gobernar, y por eso busqué la presidencia de la República en 2001.
- Renuncié a la vicepresidencia en octubre de 2000, para optar a la candidatura a la presidencia.
- Cuando tomé posesión el 10 de enero del 2002, encontré la situación económica, moral y social en malas condiciones.
- Mi sueño era ─y todavía lo es─ que Nicaragua sea posible para todos. Para ello mi plan de gobierno consistía en:
- Mejorar resultados económicos: recuperar el acuerdo con el FMI; disciplinar lo fiscal; estimular inversiones productivas; liderar los TLC; obtener el perdón de la deuda externa (la HIPC)… “Así como sin maíz no puede haber tortilla, sin recursos (dinero) no puede haber escuelas, salud, reducción de la pobreza, etc.”.
- Buscar eficacia en los gastos sociales, especialmente en salud, educación y vivienda. “Que el bienestar social se mida no por cuánta gente está bajo el amparo de programas sociales, sino por cuánta gente deja de estarlo por haber llegado a valerse por sí misma”.
- Buscar la institucionalización del Estado: despolitizar la Justicia, la Controlaría, el Sistema Electoral, el Ejército y la Policía. Y,
- Crear un plan de desarrollo de largo plazo y combatir la corrupción.
- Con mi equipo nos dedicamos a cambiar la mala imagen de Nicaragua en el exterior.
- Atrajimos más afluencia de turistas e inversiones que crearon más de 300 mil nuevos empleos productivos.
- Alcanzamos las más altas exportaciones históricas hasta ese momento; igual las reservas internacionales.
- Combatimos la corrupción que tuvo gran respaldo y eco nacional e internacional, pero la falta de respaldo de los restantes poderes del Estado causó que a la larga ese esfuerzo resultara infructuoso.
- Redujimos las deudas internas con esfuerzos propios y las deudas externas ayudados con la HIPC, ambas quedaron al final del período a niveles manejables para la economía.
- Negociamos el CAFTA junto con los hermanos centroamericanos, que atrae inversiones y crea más empleos productivos.
- Dejamos las arcas del Estado llenas con más de 1,850 millones de dólares contratados para programas de desarrollo: carreteras y otras obras de bienestar y progreso.
- Además, quedaron en ejecución 175 millones de dólares adicionales como donación de la Cuenta Reto del Milenio de Estados Unidos, etc., etc. Dejamos, pues, la mesa servida como decía una de mis tías tatarabuelas ─Dominga Bolaños de Zelaya─ “la política es como un banquete, unos sirven la mesa y otros se sientan a comer”.
- Dedicamos gran esfuerzo en profesionalizar al Ejército y a la Policía.
- Dejamos por mucho un mejor país que el que recibimos.
- Después de la presidencia, me retiré de la política; no creo en la reelección que tanto daño ha causado. Creo en democracia, creo en instituciones y estos valores traté de consolidar.
- Para seguir contribuyendo al desarrollo de Nicaragua, en mi retiro fundé la Fundación Enrique Bolaños con la que he creado la primera biblioteca virtual ─www.enriquebolanos.org─ en América Latina, que sirve como plataforma para recopilar, preservar y divulgar variadas y valiosas colecciones de información política, cultural, jurídica y variados documentos históricamente relevantes para los nicaragüenses, considerados patrimonios históricos.
- Ya contiene más de cuarenta mil documentos que incluyen más de doce mil leyes desde 1821, todas las Gacetas (diario oficial de la República) desde 1970, todos los tratados y acuerdos internacionales, documentos, revistas históricas, etc., etc.
- También contiene toda la producción histórica de mi hermano, el historiador doctor Alejandro Bolaños Geyer y la historia completa de una presidencia ─la mía─ nunca antes divulgada así, comprometida con la verdad y la transparencia, con miles de documentos, decretos, ayudas memoria, discursos, informes, etc., para que el lector se pueda formar su propia opinión.
Consideraciones para que Centroamérica llegue a ser próspera, como la deseamos
- No podemos engañarnos, para construir una Centroamérica soñada tenemos que vencer los grandes vicios que han caracterizado históricamente nuestra sociedad: la corrupción, la perversión en el uso del poder, el caudillismo y modernamente, el populismo…
- Todos debemos convencernos de que el desarrollo se logra con millones de pequeños avances y no como dictados de los gobiernos o de unas pocas innovaciones monumentales producto de unos genios o de imposiciones de una revolución.
- En Centroamérica, solamente Panamá y Costa Rica alcanzan buen desempeño, aunque pobre entre el concierto de las naciones. Los restantes van en orden descendiente desde El Salvador, Guatemala, Honduras, y Nicaragua en el doloroso último lugar. Haití está en otra liga menor.
- Desde México hasta La Patagonia solo Chile, Uruguay, Argentina, Brasil y Panamá, tienen hoy un PIB per cápita de más de US$ 10,000. El de Chile, aun siendo el mayor, es menos de la mitad de lo que ya tiene Bahamas y 25% menos de lo que tienen Trinidad-Tobago y Barbados, países caribeños.
- Tampoco ningún país latinoamericano está hoy entre los desarrollados del mundo. Argentina dejó ese selecto club hace más de cincuenta años.
- Creo que el futuro de Centroamérica, será más de lo mismo de su histórico pasado, salvo que dé una vuelta en U que tomaría varias décadas completarla. ¿Es posible? Sí. Hay muchos ejemplos históricos. Yo intenté, pero los del pacto obstaculizaron los esfuerzos.
- En la década de 1980 Irlanda era el país más pobre de Europa. En 2004 fue el segundo más rico. Si Irlanda pudo, nosotros también debemos poder.
- El milagro irlandés era el mejor ejemplo para Nicaragua porque a pesar de su historia de constantes guerras intestinas, logró su hazaña. Según Bloomberg: “Los libros de economía deben concluir diciendo: 'y ahora estudien a Irlanda'”.
- En mi gobierno, contratamos a David Lovegrove y John Magill, irlandeses que habían participado en el diseño y puesta en marcha de esa odisea, para que nos ayudaran a afinar nuestro propio Plan Nacional de Desarrollo, que diseñamos en el primer año de gobierno, y así fue perfeccionado para conducir la vuelta en U.
- La recia oposición a mi gobierno de parte del pacto Alemán-Ortega, que junto con los otros poderes del Estado que ellos manejaban, obstaculizaron la relación armoniosa para lograr el consenso nacional que un plan nacional de desarrollo demanda. Y ahora, para el futuro de Centroamérica sugiero:
- Que el diseño y dirección de la visión estratégica para el giro en U de Centroamérica hacia la prosperidad, ahora puede lograrse como se logró la paz en Nicaragua con la participación conjunta de los hermanos centroamericanos en el plan Esquipulas II, así como también se logró el CAFTA.
- Este encuentro de hoy, puede generar el plan estratégico (al estilo Irlanda) para crear Mukul I (al estilo Esquipulas II) para duplicar después en Mukul II en busca de hazañas similares para encender la chispa de ese giro en U para Centroamérica. Este liderazgo, demostrado por la selecta concurrencia y participación de los emblemáticos empresarios centroamericanos, debe iniciarlo, administrarlo, supervisarlo y heredarlo, porque toma décadas lograrlo.
A N E X O
Contra la voluntad del presidente, la Asamblea subió excesivamente los presupuestos de la Corte, la Contraloría y de la Asamblea misma:
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Hechos violentos sobresalientes en nuestra historia
En la Anarquía (1821-1858) – Alzamiento de Cleto Ordóñez (1823). Sedición de Pablo Méndez (1824). Sitio a León (1824-25). Guerra Argüello-Cerda (1827-29). Dictadura del gran mariscal Casto Fonseca (1843-45). Sitio de Malespín a León (1845). Golpe de Estado contra Laureano Pineda (1851). La Guerra Nacional (1855-57). Asesinatos de Jefes de Estado: Pedro Benito Pineda (1827); Manuel Antonio De la Cerda (1829); José Zepeda (1837); Emiliano Madriz (1845); José María Estrada (1856).
En los 30 años (1858-1893) – Guerra y sitio a León de Máximo Jerez (1863). Revolución Martínez-Jerez (1869). Estallido de El Chilamate (1875). Serie de levantamientos en todo el año 1875. Deportados y confinados (1884). Revolución conservadora derroca a Roberto Sacasa (1893). Revolución liberal derroca a conservadores (julio 1893).
En la Inestabilidad (1893-1936) – Rebelión del general Ortiz contra Zelaya (febrero 1896). 200 soldados muertos en estallido de pólvora del cuartel de Managua y se fusilan a militares (abril 1902). Batalla de Namasigüe (febrero-marzo 1907). Revolución de octubre (octubre-diciembre 1909). La guerra de Mena (agosto-octubre 1912). El Lomazo de Emiliano da golpe de Estado a Carlos Solórzano (1825). La revolución liberal de 1926. La guerra de Sandino (1926-1933). El golpe de Estado del 1er Somoza a Juan B. Sacasa (junio 1936).
En la dinastía Somoza (1936-1979) ¬ Golpe de Estado de 1er Somoza a Leonardo Argüello (1947). Frustrado atentado contra 1er Somoza (1954). Asesinato de 1er Somoza (1956). Muchos muertos el 22 de enero 1967. Invasión en Olama y Mollejones (1959). Sandinistas armados en Cuba vencidos en el Chaparral (1959). Sandinistas abatidos en Pancasán (1967). Asalto sandinista a casa de José María Chema Castillo (1974). Asesinato de Pedro J. Chamorro (1978). Quema y saqueos en León, Estelí, Masaya, Diriamba, Matagalpa, Chinandega (1978). Insurrección generalizada (1978-1979).
En el régimen sandinista (1979-1990) – Ocho años de guerra de la Contra con todo lo con-secuente (desde 1980 hasta los acuerdos de paz en Sapoá 1988 muy largo de narrar). Asesinato de Jorge Salazar, presidente del COSEP (noviembre 1980). Confiscaciones masivas de bienes de adversarios, prisioneros políticos, expulsión de sacerdotes, la piñata, etc.
En la recuperación democrática (1990-¿?) – Asesinato del coronel Enrique Bermúdez Comandante 3-80, jefe militar de la Contra (16 de febrero 1991). Asesinato del empresario Arges Sequeira, presidente de la Asociación de Confiscados de Nicaragua y miembro del COSEP (23 de noviembre 1992). Asalto a Estelí por Pedrito el hondureño con robo de grandes sumas de dinero, 45 muertos y 98 heridos (julio 1993). Secuestro a miembros de la Comisión Negociadora del Desarme en Quilalí, cometido por el Chacal (agosto 1993). Secuestro al Consejo Político de la Unión Nacional Opositora en Managua cometido por Donald Mendoza, Cara de Piña (del 19-21 agosto 1993)■